Como cada mes, en Integra Educatio realizamos una actividad cultural con nuestro alumnado de español procedente de CEAR Andalucía (Comisión Española de Ayuda al Refugiado) y el CAR (Centro de Acogida a Refugiados). Los objetivos generales de estos talleres son celebrar la diversidad cultural y lingüística y fomentar la participación y motivación del alumnado en un contexto cultural.
Cada actividad hace referencia a un hecho o festividad cultural que se celebra en dicho mes. En febrero hemos celebrado el CARNAVAL, caracterizado por la alegría, la fiesta, el baile y los disfraces. El objetivo particular de esta actividad ha sido conocer esta celebración en España y en otros países, así como compartir e intercambiar conocimientos sobre las celebraciones en todo el mundo.
¿Qué hemos hecho en IEDH?
El Departamento Sociocultural diseñó diversas actividades encaminadas al conocimiento de esta tradición, pero, como siempre, mediante un aprendizaje integral, humanístico e inclusivo. Esto es: en un plano más puramente académico, se abordó todo lo relacionado con la celebración del Carnaval en el mundo y en España, trabajando la expresión escrita, lectora y oral.
Sin embargo, en un plano holísitco –que es el enfoque de nuestros servicios–, se promovió el intercambio cultural, favoreciendo la participación individual y grupal, así como el desarrollo de la imaginación, el trabajo cooperativo y la creación artística. Todo ello se realizó en aras de extender los vínculos amistosos entre los participantes y de promover valores como el respeto, la inclusión y la integración.

En primer lugar, se introdujo la actividad explicando al alumnado qué celebramos en el Carnaval y cuándo, mostrando esta festividad como una pieza clave de la cultura de nuestro país. Previamente, se realizó una ronda preguntas para comprobar si conocían esta fiesta. A continuación, se trabajó el léxico relacionado con esta festividad. Así, el alumnado aprendió términos específicos como disfraz, carroza, desfile, etc.
Al tratar el tema de los disfraces, se llevó a cabo un pequeño juego donde el estudiantado tuvo que pensar de qué nos podemos disfrazar. Posteriormente, se mostraron diferentes categorías de disfraces: animales, profesiones, cantantes… Esto fue realmente interesante y útil para aprender nuevo vocabulario y para repasar el estudiado previamente. Dada nuestra apuesta por la adaptación y la individualización, para los niveles bajos se propuso desarollar esta actividad a través de juegos como el ahorcado o la mímica.

La tercera actividad consistió en realizar una especie de recorrido de esta festividad por las diferentes ciudades españolas, mostrando las tradiciones y las celebraciones que se realiza en cada una de ellas. Se mostraron vídeos, imágenes, canciones, etc., para que el alumnado tuviera un apoyo visual y auditivo y, así, pudiera imaginarse mejor cómo es esta fiesta. A partir de ello, se le animó a realizar una pequeña comparación con alguna fiesta similar de sus países de origen.

“La vida es un Carnaval” fue el título de la cuarta actividad, dirigida a mejorar la comprensión auditiva a través de la canción de Celia Cruz que lleva este título. Se mostraron diferentes estrofas a las que les faltaban algunas palabras. En una primera escucha de cada estrofa, no se les mostraron las palabras que debían buscar para, de esta manera, comprobar su comprensión. En una segunda escucha, se les ofrecieron las diferentes palabras para terminar de completar la canción.
Por último, tuvo lugar la actividad más lúdica y artística: crear una máscara de carnaval. Se repartieron folios en blanco y lápices de colores y, mediante la plantilla de una máscara, el alumnado diseñó su máscara. A su vez, se propuso diseñar un disfraz y, también, inventar un grupo de carnaval, como una comparsa o una chirigota, y ponerle nombre al grupo. Mientras tanto, se escuchaba música ambiente de esta festividad: Celia Cruz, Samba de Brasil, Carnaval de Cádiz… ¡Los más atrevidos incluso intentaron cantar y bailar!
En definitiva, se trató de una actividad didáctica y entretenida donde los alumnos no solo aprendieron español en sí, sino que adquirieron un contenido cultural amplísimo. Además, formaron parte de un rico intercambio cultural en un ambiente amistoso, distendido y colaborativo. Durante este taller estuvo presente la fiesta, la alegría, la esperanza; y también el respeto, la diversidad y la tolerancia.